miércoles, 10 de agosto de 2016

Resolviendo conflictos

Pensé cual sería la mejor manera de incluir a mi esposa
Con la idea de conquistar el mundo

Tal vez una cena, velas, luz tenue, el apartamento arreglado y limpio,
(Pensando un poco en el dinero) y me pareció una buena idea,
Cuando ya estaba casi resuelto a empezar a organizar
Recordé lo que tenía pendiente en el trabajo,
Así que empecé a posponer la cena,
Y la compra del regalo hasta que se me salió de la semana.

Ella no sabía que había hecho durante el mes de las manillas
Así que el ambiente no estaba del todo bien (algo que no tuve en cuenta)

Se presentó la opción de contarle todo
Cuando estábamos almorzando un fin de semana
Y varias veces sentí el impuso de decirle
Pero había practicado tantas veces frente al espejo
Que cuando fui a contarle no supe cómo empezar, y no le dije nada

En el trabajo la desesperación por avanzar con algo en lo referente al viaje
No me permitía concentrar cabalmente
Necesite de tiempo para encontrar el equilibrio
Entre lo que estaba haciendo y lo quería hacer.

Por una parte estaba mi afán por viajar y por otra estaban mis obligaciones
Me estaba yendo mal en el trabajo como consecuencia de las manillas
A tal punto de tener que responder en la oficina de Andrés Carbajal
El dueño de la empresa en tres oportunidades.

Así que resolví trabajar horas extra (sin pago)
Por ponerme al día en mis asuntos,
El jefe se fijó en el esfuerzo que estaba haciendo
Y al segundo día de quedarme luego de mi jornada laboral
Se ofreció a llevarme a mi casa cuando decidiera salir del trabajo.

La verdad es que me emocione pensando en que quería decirme el jefe
Porque yo cría que él tenía en cuenta el esfuerzo estaba haciendo por cumplir,
Le di tantas vueltas y vueltas al asunto
Hasta que no me pude concentrar de nuevo,
Así que hice algo de maña hasta que consideré prudente salir.

Cuando busque al jefe en la oficina de él,
Lo encontré ocupado en una conferencia con un proveedor por internet
Y al esperar un rato caí en cuenta que eso estaba como demorado
Y me fui para la casa a descansar.

Al despertarme mi esposa estaba enojada,
Dijo que no pudo descansar en toda la noche
Que di vueltas en la cama, que hable dormido,
Que me veía pálido y ojeroso y que le preocupa mi condición física.

No acostumbro a llegar tarde
Pero por atender la preocupación de mi esposa
Y levantarme después de lo acostumbrado
No llegue al tiempo de la entrada al trabajo

Recuerdo que Andrés también llego tarde
Y pensé que la situación estaría bajo control
Pero un “amistoso” compañero
Se encargó de complicar las cosas
Así que una vez más me encontré
Sentado frente al escritorio del Jefe.

Yo creí que el al verme me preguntaría
Porque me fui primero el día anterior
Pero seguramente salió y no noto algo raro,
Porque no dijo nada al respecto
Cuando termino la amonestación y fue mi turno de hablar
Fue casi mágico el cambio de la conversación.

Hablamos de los problemas por los que él estaba pasando
Por cerca de una hora
Luego fue mi turno de contarle mis problemas…
(Parecíamos amigos de toda la vida)
Le conté sobre mi idea del viaje,
Me dijo que él había hecho un viaje similar cuando tenía mi edad
Me contó a donde fue. Que hizo para conseguir dinero
Como consiguió hospedaje, como soluciono el transporte,
Pero fue en esa conversación en la que resolví que hacer.

Sus consejos fueron fundamentales en esta historia
Y aunque no tenía todas las respuestas que necesitaba
Me puse en la tarea de hacer exactamente

Lo que el en esa oportunidad me dijo que hiciera.